La línea entre las redes sociales y los servicios financieros parece cada vez más difusa. Con el auge de las economías virtuales y las criptomonedas, incluso los gigantes de las redes sociales ya no pueden ignorar la presión de los reguladores. Uno de los ejemplos más recientes involucra a TikTok. La plataforma, conocida por sus videos virales y sus creadores de contenido, se encuentra ahora en la mira de las autoridades financieras británicas. De hecho, su sistema de TikTok Coins, utilizado para remunerar a los creadores, podría ser considerado como una actividad de intercambio de criptomonedas, una categoría estrictamente regulada por la Autoridad de Conducta Financiera (FCA) en el Reino Unido.